En este mundo globalizado e integrado, cada vez más interconectado por las redes de abasto, el flujo de mercancías a lo largo y ancho del planeta ha aumentado considerablemente. En consecuencia, el sistema de transporte de estas mercancías desde su lugar de origen, ya sean materias primas o productos terminados, hasta su destino de producción o final, se ha vuelto una pieza clave en los procesos de distribución y comercialización.

El sistema de transporte además garantiza el funcionamiento de este modelo productivo y depende directamente de las infraestructuras territoriales y urbanas para asegurar la libre y ágil movilidad de las mercancías.

Actualmente, el incremento en la movilidad de las mercancías se ha enfrentado con los problemas relacionados con la movilidad del transporte en todas las ciudades del mundo: las redes de carreteras y vías aéreas existentes en un país, su estado, y por supuesto, los problemas del tráfico y movilidad dentro de las ciudades, así como la seguridad de conductores y mercancías.

Ante estos problemas y el reto que representan para el proceso de abasto, han surgido una serie de tecnologías agrupadas bajo el nombre de Sistemas Inteligentes de Transporte o ITS por sus siglas en inglés, desarrolladas con la finalidad de mejorar la seguridad y eficiencia del transporte terrestre, así como facilitar las tareas de control, gestión y seguimiento.

Estas tecnologías están diseñadas para reunir información, procesarla, analizarla y usarla para mejorar la movilidad del tráfico, la seguridad de los conductores, mejorar el tráfico y hacer más eficientes y cómodos los desplazamientos.

A continuación te compartimos algunos ejemplos de estas tecnologías y la forma en la que benefician a los sistemas de transporte:

1.- Estaciones meteorológicas: permiten preveer las condiciones del clima que pueden presentarse en una ruta determinada y así planear los desplazamientos y medidas preventivas.

2.- Cámaras de explotación: permiten conocer el estado de las carreteras y avisan en tiempo real a los conductores cuando hay un cierre o un bloqueo, lo que permite planear una ruta alterna antes de quedarse atorado en el tráfico.

3.- Paneles de mensajería: se colocan en las carreteras y envían información en tiempo real sobre las condiciones de una carretera, por ejemplo: banco de niebla, reduzca la velocidad, y así brindan la posibilidad de un viaje más seguro.

4.- Radares de control de velocidad: garantizan el respeto de los límites de velocidad y así brindan seguridad a los usuarios de las carreteras.

5.- Sistemas de conteo de tráfico: estos sistemas reúnen información sobre el número de vehículos que circulan por una carretera, en qué horarios, etc., y con esa información las autoridades responsables de la infraestructura carreteras pueden hacer mejores planificaciones sobre movilidad, ampliaciones de carriles o construcción de rutas alternas.

6.- Casetas de telepeaje: diseñadas para reducir el tiempo de espera en las casetas de cobro y así mejorar los tiempos de recorrido.

Estos sistemas son apenas una muestra de las cientos de aplicaciones que se siguen desarrollando para mejorar la seguridad y movilidad del transporte en las carreteras y que repercuten favorablemente en el sistema de transporte de mercancías.